Un Árbol y Escrituras Delgadas

Una mañana, mi esposo y yo dábamos nuestra caminata diaria por el vecindario. Se sentía bien caminar y hablar. Nuestra hija nos llamó para decirnos que iba rumbo al trabajo y mencionó que nos había visto caminar desde la distancia. Dijo que nos veíamos delgados desde lejos. Nos reímos. -Alma Ovalle

Por Alma Ovalle

“Desde la distancia, las Escrituras se ven ‘delgadas.”

Desde una distancia

Pero me puse a pensar cuando leo la Biblia, a menudo estoy a distancia. Desde la distancia, las Escrituras parecen “flacas”. Flacas en el sentido de que estoy entrecerrando los ojos para ver puntos en la Biblia que no entiendo. A medida que continúo en mi viaje espiritual, los puntos en la distancia parecen más claros y empiezo a comprender no solo los puntos individuales, sino también cómo están conectados. Al leer diariamente la Palabra de Dios, obtengo conocimientos nuevos y frescos de forma que nunca hubiera imaginado.

Un tronco y su brote

Hace unos años, cortamos un gran árbol en la parte frente a nuestra casa. Sus ramas se habían llenado de hojas cada vez más y muchas estabán colgando en la calle, impidiendo la línea de visión de los conductores que pasaban. Los podadores de árboles cortaron sus ramas hasta donde parecía un tronco alto y solitario. Lejos de su gloria anterior, cada vez que lo miraba, mi corazón se entristecía al ver lo que quedaba de su cuerpo sin vida. Sabía que era necesario hacerlo, pero su sombra siempre me había consolado y refrescado nuestra casa; era un lugar donde nuestros hijos habían crecido, jugando debajo de sus ramas. Meses después, noté que un pequeño brote salía de la parte superior del tronco alto. Me acerqué al tronco y lo miré con gran alivio. El árbol estaba vivo y comenzaba a florecer de nuevo.

De repente, una bombilla se encendió en mi cabeza. ¿Cuántas veces había leído Isaías 11: 1, “Un retoño brotará del tronco de Isaí; de sus raíces un Renuevo dará fruto” (NVI) ¿Cuántas veces había escuchado sermones sobre el regreso de Jesucristo en los que se había citado este pasaje en particular? ¿Por qué ahora entendía mejor este punto espiritual que antes me había parecido tan delgado?

Raíces profundas

No importa cómo se vea mi árbol, sus raíces estaban ocultas muy por debajo de la superficie. El árbol había estado vivo todo el tiempo y sus raíces eran un símbolo de su fuerza, sin importar lo que hiciéramos con sus ramas. A través del pasaje de Isaías, Dios reveló que su Hijo, Jesús, era el retoño que saldría del tronco de Isaí. Lo cortarían y derribarían violentamente, pero volvería a la vida. Sus raíces producirían una rama que daría fruto. Se necesitó un podamiento de árbol para recordarme que, aunque no podía ver las raíces debajo de la tierra, había vida, y la vida seguía formándose en abundancia. La evidencia de su crecimiento se había desarrollado en secreto. La nueva vida había brotado como un pequeño brote que pronto se convirtió en muchas ramas.

“Podemos confiar en que

las raíces de Dios

nos están dando fuerza

para seguir adelante.”

En la vida, incluso cuando surgen problemas o momentos difíciles, podemos confiar en que las raíces de Dios nos están dando fuerza para seguir adelante, aunque, como dice 2 Corintios 4: 9, “[somos] perseguidos, pero no abandonados; abatidos, pero no destruidos” (NVI). Esconder la Palabra de Dios en nuestro corazón, oculta a la vista de la gente como las raíces debajo del árbol, algún día dará fruto. La Biblia me pareció un poco menos delgada ese día.

Escrituras delgadas

Cuando comencé mi viaje con Cristo, las palabras de la Biblia parecían delgadas, como puntos en la distancia. Cada vez que me acerco a Dios a través de la lectura de esta Palabra inspirada por el Espíritu, veo que los puntos en la distancia comienzan a aclararse un poco. Podemos interpretar la Palabra de Dios en nuestro caminar diario con Dios a través de la Biblia. A lo largo del camino, continuaremos creciendo en nuestra fe, atrayendo a otros hacia Dios y actuando de maneras que traigan esperanza, amor y justicia al mundo.

Conectando los puntos 

Un día, dice Pablo, veremos el cuadro completo de lo que Dios nos estaba diciendo a través de la Biblia. Los puntos en la distancia quedarán completamente claros. “Por ahora solo vemos un reflejo como en un espejo; luego veremos cara a cara. Ahora lo sé en parte; entonces conoceré plenamente, como soy plenamente conocido” (1 Corintios 13:12 NVI). Los puntos que antes parecían distantes y difíciles de distinguir ya no serán “delgados”. El movimiento hacia una comprensión más completa de las Escrituras, a través del Espíritu de Dios, nos será completamente revelado.

“La lectura diaria de la Palabra de Dios

trae energía a nuestras almas y

nos da una comprensión más profunda

del mensaje de Dios para nosotros.”

Podemos estar seguros de que así como nuestras caminatas diarias por el vecindario aportan energía a nuestros cuerpos, la lectura diaria de la Palabra de Dios trae energía a nuestras almas y nos da una comprensión más profunda del mensaje de Dios para nosotros. A medida que nos acercamos a Dios a lo largo del camino de la vida, que sea uno marcado con muchos puntos en el camino que se vuelven cada vez más claros. Las tres pasiones de Alma Ovalle, incluyen el trabajar con mujeres, la comunicación y el liderazgo. Su trabajo actual incluye traducción de documentos y traducción simultánea para eventos de toda la iglesia en inglés y español. Alma es miembro de Sarasota Community Church.

Publicado por primera vez en la revista Leader, invierno de 2020–21, © MennoMedia. Reimpreso con permiso.